El mercado inmobiliario de Santiago evoluciona hacia la especialización
Con nuevas preferencias y tecnologías, Santiago redefine su oferta inmobiliaria con propuestas cada vez más segmentadas y especializadas.
El mercado inmobiliario de Santiago atraviesa una fase de sofisticación, transitando hacia un nuevo ciclo donde la estrategia, la especialización y el valor a largo plazo se consolidan como los principales ejes de desarrollo.
Para las constructoras y desarrolladores con una visión de futuro, el panorama actual revela oportunidades para la creación de proyectos de alto estándar que responden a las nuevas demandas del público.
Infraestructura y sostenibilidad como motores del nuevo ciclo
En el escenario actual, existen claros focos de dinamismo que definen la hoja de ruta del sector. La inversión se está concentrando en proyectos que ofrecen un valor diferencial y una sólida perspectiva de futuro. Uno de estos pilares es el desarrollo inmobiliario ligado a nuevas obras de infraestructura.
La demanda de viviendas, por ejemplo, se mantiene activa en comunas del sector norte de la capital, como Colina, Lampa y Quilicura. Este interés responde directamente a la plusvalía generada por proyectos como el futuro tren Santiago-Batuco, que mejorará drásticamente la conectividad de la zona.
El otro gran motor de desarrollo es la construcción sostenible, que se ha consolidado como un estándar estratégico en el mercado. Las cifras lo avalan, con 479 proyectos registrados bajo la Certificación Edificio Sustentable (CES) y otros 285 con el sello internacional LEED.
Estos proyectos no solo responden a una mayor conciencia ambiental, sino que representan activos más atractivos y con una mejor percepción de mercado, facilitando su desarrollo en un entorno que valora la calidad y la visión de futuro.
La tecnología como aliada de la eficiencia y la calidad
Para optimizar los procesos y elevar la productividad, el sector avanza hacia la adopción de nuevas tecnologías. La metodología BIM (Building Information Modeling), que permite una gestión digital integral de las obras, es una herramienta clave para garantizar la eficiencia. Su implementación es cada vez más común en las grandes constructoras de Santiago, que buscan entregar proyectos con un mayor control de calidad y precisión.
La Inteligencia Artificial (IA), por su parte, se perfila como un horizonte de gran potencial. Con 8 de cada 10 empresas chilenas planeando aumentar su inversión en IA para 2025, su uso en la construcción para tareas como la optimización de la cadena de suministro y la planificación de proyectos representa la próxima frontera de la innovación en el sector.
Una visión estratégica para 2025
El futuro inmediato del sector inmobiliario en Santiago estará definido por la inteligencia y la capacidad de adaptación estratégica. El éxito para 2025 dependerá de la especialización: desarrollar proyectos de nicho, anclados en la plusvalía de la nueva infraestructura y en el valor comprobado de la sostenibilidad.
La adopción de tecnologías que permitan un control de costos riguroso y una ejecución impecable será crucial para entregar valor a un público cada vez más exigente y conocedor. El mercado avanza hacia una nueva etapa de madurez, donde la calidad y la visión a largo plazo son las claves del éxito.